Si yo tuviera una pua
El pasado miércoles, la biblioteca se llenó de risas, emoción y un poco de misterio gracias a nuestra actividad de animación a la lectura protagonizada por un cuento muy especial: "Si yo tuviera una púa"🦔
Comenzamos la tarde con una lectura entrañable, sumergiéndonos en el mundo de Pepincho, un pequeño erizo con un gran corazón. Vimos, paso a paso, cómo nuestro amigo iba perdiendo sus preciadas púas en un esfuerzo por agradar a quienes pensaba que eran sus amigos. Fue una historia preciosa para reflexionar sobre la importancia de ser uno mismo, de aceptarnos tal como somos y de recordar que nuestros verdaderos amigos nos quieren con todas nuestras "púas" (o peculiaridades). ¡Y, por supuesto, descubrimos que Pepincho era perfecto con y sin ellas!
Pero la aventura no terminó con el cuento... ¡solo acababa de empezar!
Nuestro pobre Pepincho se había despistado y no conseguía encontrar el camino de vuelta a su madriguera. Para ayudarlo, tuvimos que convertirnos en intrépidos detectives y superar una serie de desafíos:
*Laberintos intrincados que ponían a prueba nuestra orientación.
*Pruebas de series que obligaban a pensar con lógica.
*Puzles que solo se resolvían trabajando en equipo.
¡Fue un desafío increíble de trabajo en equipo, ingenio y concentración! Tras superar todas las pruebas con éxito, ¡lo conseguimos! Pepincho volvió a casa sano y salvo, y nosotros nos fuimos con la satisfacción de ser unos verdaderos héroes de la biblioteca.
¡Gracias a todos los que vinisteis a compartir esta tarde llena de lectura, valores y juegos! Nos encanta ver cómo la biblioteca se convierte en un lugar de aventuras y aprendizaje.
¿Qué es lo que más os gustó de la actividad? ¡Dejad vuestros comentarios abajo!
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