Restaurante bibliopolis

Celebramos el colofón de nuestros talleres y el reto de lectura de este año, "MasterChef Lector", de una manera muy especial. Transformamos la biblioteca en un restaurante literario, brindando una experiencia única a nuestros jóvenes lectores.

Con la colaboración entusiasta de varios jóvenes, quienes se convirtieron en camareros y cocineros por un día, preparamos el escenario perfecto. Las mesas estaban elegantemente dispuestas con platos, vasos y cubiertos, listas para recibir a nuestros comensales.

Como jefa de sala, los esperé en la puerta y les entregué un sobre que no podían abrir hasta que yo lo indicara. Los camareros acomodaron a los comensales en sus mesas, y así comenzó el espectáculo. Les entregamos una carta con un menú muy especial que incluía delicias como "crema de besos", gazpacho de animales, sushi del mar, y chiquicuentos con patatas, entre otros.

Los camareros tomaron nota de las preferencias de cada comensal y pasaron la comanda a la cocina. Mientras se preparaban los primeros platos, obsequié a los comensales con unas "adivinanzas de entremés" que resolvieron con gran destreza. Luego llegó el momento de servir los primeros platos: ¡cuentos! La sorpresa fue mayúscula, ya que esperaban una merienda tradicional. Aun así, degustaron con entusiasmo los primeros platos, los segundos y el postre especial de la casa, este último con la temática de cocina, en honor al reto "MasterChef Lector".

Al finalizar el festín literario, llegó el momento de entregar la cuenta... ¡20€! La sorpresa fue general, pues nadie había traído cartera. Entonces les pedí que abrieran los sobres entregados al inicio. Dentro, encontraron un billete de 20€ con la parte trasera en blanco para que apuntaran su plato favorito. Tras pagar la cuenta simbólica, les entregamos un regalo muy especial, cortesía del Ayuntamiento de Cañizares y Carrefour España.

Cada comensal recibió una bolsa que contenía:

Su cartilla de lectura de este año, para que vean todo lo que se han esforzado.
Un cuaderno de recetas y un bolígrafo.
Un delantal y gorro de cocina.
Un juego Monopoly Act for Food (cortesía de Carrefour).
Para culminar esta tarde tan intensa, merendamos todos juntos y dimos por finalizadas las actividades de este año. Fue un cierre inolvidable para un año lleno de lectura y creatividad.

Agradecemos a todos los participantes y colaboradores por hacer posible esta maravillosa experiencia. ¡Nos vemos el próximo año con más actividades y retos de lectura!
 







Comentarios

Entradas populares de este blog

El cazo de Lorenzo

Sopa de piedra

El piojo saltarin en la biblioteca